En las recientes entrevistas que dio a medios de comunicación la esposa de Joaquín Guzmán Loera (a) El Chapo, mencionó que en la captura de febrero de 2014, en Mazatlán, ella había escuchado voces de personas que hablaban en inglés. Eso sembró la duda sobre la participación, ilegal, de agentes de la CIA en México. Hoy se le ordena a la SEMAR que informe sobre todos los datos que quedaron registrados en ése año, para poder acreditar estos dichos o desmentirlos. Seguramente los sicarios de la SEMAR sí estuvieron asesorados por agentes de aquél país, así que es de interés público el conocer estos datos y los sucesos que hasta el momento han sido ocultados.
