Enrique Peña Nieto y el grupo de delincuentes que tiene en los altos cargos del mal gobierno, han provocado que la deuda pública se dispare en niveles inauditos. En una época en la que el ahorro debe ser la base, para lograr salir de las dificultades económicas, el individuo que está en la Presidencia se ha dedicado a despilfarrar los pocos recursos que no se roban; baste recordar el palacio flotante que adquirieron y en el que ahora se dará vida de rey. Mientras tanto, el país se va a pique y debemos más que en dos sexenios juntos, completos, en tan solo tres años del criminal EPN en el poder.
