CDG y CJNG reparten despensas en comunidades pobres del estado de Tamaulipas y del estado de Jalisco. ¡Son unos miserables!
Cuando no hay Estado; cuando la gente ha vivido bajo el dominio de organizaciones criminales disfrazadas de partidos políticos; cuando la cultura del narco ha permeado en todos los estratos de la sociedad, éstos aprovechan los vacíos y «siembran semillas».
¿Cómo les van a cobrar toda esta «bondad»? ¿De dónde vienen los recursos para comprar los productos que reparten? ¿Cuánta sangre ha corrido para que esto suceda?
Por donde lo vean, esto está muy mal. Ni ellos, los cárteles, son buenos y mucho menos lo que entregan viene de algún trabajo honrado que estos tengan. Viene del dinero de sangre: secuestros, robos, tráfico de drogas, extorsión, trata de personas, trata de mujeres, asesinatos, etc.
Aquí algunas imágenes de sus «gestos bondadosos»:
En el estado de Tamaulipas el Cártel del Golfo ha estado en Ciudad Victoria y en Matamoros entregando despensas a personas de bajos recursos. Las cajas que contienen algunos productos básicos llevan un logotipo de alguien que se autodenomina «Comandante Vaquero» o «46».
En Jalisco, la gente del Cártel Jalisco Nueva Generación también ha hecho lo mismo; llevan productos de primera necesidad etiquetados con uno de los símbolos de Nemesio Oseguera Cervantes, «El Mencho».
En este espacio no juzgamos a las personas que por necesidad toman estos regalos, pero sí señalamos la inmoralidad de estos personajes que aprovechan la contingencia grave que se vive en el país para hacer presencia y «marcar territorio». ¿Cómo se los cobrarán después?
También señalamos la ausencia del gobierno, que por un lado presume multimillonarios recursos entregados en apoyo a los que menos tienen, mientras que por el otro siguen haciendo oídos sordos para escuchar que la gente no ha recibido nada de lo que ellos prometen.
Balaceras y narcobloqueos son la característica desafortunada cuando hablamos de la frontera de Reynosa, en el estado de Tamaulipas. La guerra intestina que sostiene el Cártel del Golfo, ha dejado muerte, desolación y días de extrema violencia, este inicio de semana.
Usuarios de las redes sociales han convertido en práctica común la grabación de videos, desde las ventanas o puertas de sus casas, escondidos y arriesgándose a ser alcanzados por las balas que vuelan todos los días o todas la noches en las colonias de cualquier parte de la ciudad.
La vocería de seguridad, a cargo de Luis Alberto Rodríguez, informó que entre lunes y martes, seis personas civiles perdieron la vida. Tres cadáveres calcinados fueron encontrados en el Parque Industrial Reynosa. Una llamada anónima alertó a las autoridades que al acudir, encontraron los cuerpos en la brecha E99 del rancho El Lobo. En varios puntos de la ciudad también se reportaron narcobloqueos.
El día de ayer, según la vocería, también perdieron la vida dos personas -una por arma blanca y otra por arma de fuego-. Del último cadáver informó que fue localizado después de ocurrida una balacera en la Colonia Las Fuentes, Sección Lomas.
Las autoridades llegaron a un domicilio en dicha colonia, donde se habían reportado las detonaciones y en el lugar encontraron a la persona muerta, además de un herido y pudieron incautar cuatro automóviles. Detuvieron a un sospechoso y aseguraron armas largas.
El estado de Tamaulipas se desangra; más de una década de balaceras, de ejecuciones, de narcobloqueos y de miles de asesinatos en todo la entidad. Dos de los más crueles y poderosos cárteles del narcotráfico, Los Zetas y el Cártel del Golfo, antes unidos y hoy enemigos a muerte, se han hecho de la entidad a base de terror, extrema violencia y enfrentamientos entre ellos y las fuerzas de seguridad.
Compartimos con ustedes la grabación de dos personas que, desde sus celulares, capturaron las balaceras ocurridas en sus propias colonias.
Y de las calles y los narcobloqueos, a las redes sociales, donde los sicarios del Cártel del Golfo difunden videos amenazantes, que nos dejan en claro que su lucha es a muerte.
El Cártel del Golfo entrenaba sicarios en un narcocampamento ubicado en Matamoros, en el estado de Tamaulipas; en el lugar también se blindaban vehículos que usaba el grupo criminal.
El cártel más antiguo del noreste, se ha caracterizado por el uso de vehículos arreglados y blindados de forma artesanal, para la guerra que tuvieron en un momento con los Zetas, pero también para la que libran contra células de su misma organización y contra el gobierno.
También en el otro lado del país, el Cártel del Golfo y los Zetas, han creado sitios de entrenamiento donde sus sicarios practicaban con armas y desarrollaban métodos de ataque y defensa. La Secretaría de la Defensa Nacional ingresó a este sitio y se encontró, además, un taller donde había vehículos que artesanalmente habían sido modificados para el uso de los delincuentes.
En un video que circuló en las redes sociales se puede observar la zona donde eran modificadas camionetas y coches, incluso para que pasaran por vehículos de la Marina Armada de México y la Policía Federal.
Fue decomisado en el mismo sitio, un arsenal de armas largas, cartuchos, cascos y fornituras que eran empleadas para el adiestramiento de los sicarios en Matamoros.
El Cártel del Golfo sigue teniendo una disputa interna por apoderarse del control de la plaza y este narcocampamento es la prueba de que a la batalla interna, los sicarios van preparados. Zetas y «Golfos» han usado estos métodos desde hace varios años, de los que nos hemos enterado cuando las mal llamadas «fuerzas de seguridad» llegan a ellos y exhiben lo encontrado en medios oficiales o en las mismas redes sociales.
También compartimos con ustedes la información que difundimos cuando fue abatido el «Comandante Toro», suceso que provocó una guerra interna entre los mismos miembros del CDG por apoderarse del control de la plaza en Reynosa.
Confirman la muerte de “El Comandante Toro”, líder del Cártel del Golfo en Reynosa (videos balacera e incendios)
«Si lo que se requiere es que la gente no note los excesos y los lujos, entonces tienes que estar donde todos sean ricos y así pasar inadvertido», es la frase que parece ser que los dueños de los cárteles en México tienen presente cuando escogen a este municipio como el lugar donde se sienten blindados.
En el año 2015, la cadena de televisión española «La Sexta» realizó una serie de programas donde recorrió los diez lugares más peligros del mundo. Lo llamaron «En Tierra Hostil». Tres de esos lugares estaban en México: Apatzingán, en Michoacán, Tijuana, BC y Monterrey, en Nuevo León.
Hoy, San Pedro sigue siendo el sitio donde mejor se la pasan los narcos: no existen operativos para investigar quiénes son las personas que viven entre tanta opulencia en el lugar; las policías están para resguardar a los grandes ricos dueños de las impresionantes residencias, que contrastan con las calles del Monterrey que vive la gente de a pie.
Las drogas han pasado a ser el «gancho» que los jóvenes persiguen al llegar a San Pedro; se olvidaron del Barrio Antiguo y ahora las discotecas y bares, del municipio que sigue siendo el más seguro de México, son el punto de reunión de muchos jóvenes que prefieren ir allá, que estar recorrer los municipios de la zona metropolitana.
En Ciudad Victoria, Tamaulipas, tres mujeres fueron acribilladas por hombres armados que estaban extorsionándolas. Dejaron de pagar ‘la cuota’ y fueron asesinadas.
Los grupos del crimen organizado en Tamaulipas, no solo se dedican al tráfico de drogas, sino que han encontrado una forma de poder costearse sus «gastos», extorsionando a los ciudadanos y asesinándolos, para sembrar terror, si se niegan a pagar.
No sabemos cuánto haya sido lo que estas tres mujeres estaban pagando al cártel, pero suponemos que un negocio como el que ellas tenían, no podía dar mucho y seguramente se vieron en la encrucijada de pagar o tener para comer.
Una mujer de la tercera edad, otra adulta y una joven fueron balaceadas, de una forma cobarde, por los criminales que llegaron hasta su negocio. Tenían balazos en las espalda y una de ellas que trató de esconderse en el baño, perdió la vida y recibió el tiro de gracia.
México, sus ciudadanos, no solo la gente en Tamaulipas, vive indefensa y abandonada a su suerte, en manos de los criminales que se asocian con autoridades y éstas les otorgan camino libre para realizar cualquier tipo de brutalidad, como la que referimos de Ciudad Victoria.
Por la zona, suponemos que los responsables son miembros del Cartel de los Zetas, ya que se han apoderado de la ciudad desde hace mucho y han llenado de sangre y terror a la población en su totalidad. Mientras que los alcaldes o el delincuente Cabeza de Vaca, seguramente vive muy tranquilo en San Antonio, Texas y no se entera o ni le interesa la violencia que padecen los ciudadanos.
Desde nuestro espacio enviamos nuestras condolencias a la familia de cada una de estas mujeres y repudiamos el suceso, a la vez que hacemos responsables a los tres niveles de gobierno en el país.
