Hoy, en otro intento de desviar la atención, aunado a la supuesta captura de ‘La Tuta’, el mal gobierno de Enrique Peña Nieto, quiere hacernos creer que ‘toma cartas en el asunto’ y decide remover a Murillo (a) ‘el cansado’ Karam de la titularidad de la PGR. Lo que no dice Peña Nieto, es que también podría fincarle responsabilidades penales, por la protección que dio a la Policía Federal y al Ejército mexicano, cuando quedó al descubierto que ambos participaron directamente en los hechos de Iguala del pasado 26 y 27 de septiembre. No nos sirve de nada que se vaya de la PGR, porque al final está siendo protegido y solamente se le ‘esconde’ en un sitio donde no sea tan visible, mientras esperan que la memoria del mexicano, vuelva nuevamente a olvidarse de él.
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