Una vez más, desde fuera de México, se vuelve a señalar a la PGR y su investigación fallida sobre el caso Ayotzinapa. La Organización Mundial Contra la Tortura pone el dedo en la yaga y señala directamente a los ‘culpables’ fabricados por la justicia mexicana, que no están en la cárcel por otra cosa, más que por haber tenido que declarar en su contra, a base de tortura. Apegados al Protocolo de Estambúl, esas personas tendrían que estar libres ya, porque sus testimonios y declaraciones no son válidas ante ningún juez, en ningún caso, excepto si se trata de las corruptas instituciones de procuración de justicia de México.
