Ulrich Richter, el abogado de Humberto Moreira que en días pasados anunció que presentaría facturas para comprobar que su representado no lavó dinero, es un abogado de casos grandes como el de Oceanografía, por ejemplo.
Desde la presidencia Fox, quien en todo momento era «ayudado» por Martha Sahagún y sus cachorros -Manuel y Jorge Bribiesca-, así como su hermano Guillermo Sahagún, se habían convertido ya más en los «coyotes de los pinos» como eran llamados entre sus conocidos al otorgar permisos a amigos, exentar de impuestos a quienes les dieran jugosas comisiones, y entregaban contratos públicos sin más preguntas que la cantidad del maletín que tenían en frente, entre sonrisas, apretones fuertes de mano y golpes de espalda.
¿O si no a qué pensaban que se refería el término «amigos de Fox»?
En esas épocas, una de las empresas «amigas» de Fox era Oceanografía, propiedad de Amado Yáñez Osuna, que fuera intervenida por autoridades federales bajo las acusaciones de fraude, lavado de dinero, falsificación de documentos oficiales y hasta de delincuencia organizada, pues según los mismos trabajadores de la compañía, se mantenían fuertes lazos con los miembros del Cártel del Golfo.
El caso no se quedó en Fox, sino que se extendió a Calderón por la protección a la empresa y que desde la presidencia de la República, hicieran que PEMEX le asignara a la compañía miles de millones de dólares sin importar si la compañía contaba en realidad con capacidad técnica y el equipo necesario, entre otras cosas.
Al quite entró Ulrich Richter, quien fue asesorado para diversificarse y comprar equipos de fútbol, pactar con el Universal por un millón de dólares, con pretexto del uso de la franquicia de El Gráfico de Campeche (pero a los socios no se les toca ni ataca ¿no?), así como se le asesoró salir huyendo para evitar la acción de la justicia.
Moreira, justo antes de ser apresado en España, sonreía muy contento en la fiesta de XV años de la hija de Ulrich Richter, misma foto que fue publicada por una afamada revista del corazón político y nobiliario, bajo el título de Sweet Fifteen.
¿Los invitados a la fiesta de Richter? Manlio Fabio Beltrones, presidente actual del PRI; Edgar Elías Azar, presidente del Tribunal de Justicia del Distrito Federal; y Ricardo Henaíne, empresario poblano, ex presidente del club de fútbol Puebla y beneficiario durante muchos años de un comodato de terrenos públicos, en los que instaló el sitio de diversión llamado Valle Fantástico.