Decenas de miles de desplazados en el país, sobre todo en los estados donde los intereses económicos, por controlar las rutas de tráfico de drogas y apoderarse de los recursos naturales. Desde 2006, cuando Felipe Calderón tuvo la ‘gran idea’ de sacar a los sicarios de verde de la SEDENA a las calles, el número de personas amenazadas por el crimen organizado y gubernamental, aumentó. El terror se apoderó de las poblaciones y ante la posibilidad de perder la vida, la gente prefirió perder sus propiedades y salir huyendo de sus comunidades. La tragedia se cuenta por decenas o centenas de miles; en realidad la cifra se desconoce y los cálculos son aproximados.
