Llevamos semanas, meses, años… contando historias de terror sobre la violencia imparable en Tamaulipas. Nuevo Laredo ha padecido los estragos del crimen organizado, pero también del crimen gubernamental, desde hace muchos años: desaparecidos, secuestrados, torturados, asesinados y todo, en presencia de miles de policías, soldados, marinos y federales. Los cárteles se disputan ‘la plaza’ y es muy común leer información que no te permite saber los motivos de tantas ejecuciones; como en éste caso, donde un grupo de hombres ejecutó, previa tortura y con tiro de gracia, a supuestos secuestradores. ¿Quién puede asegurar que en realidad lo eran? Y ya saben ustedes, el Jefe de Plaza, Egidio Torre Cantú, es muy feliz viajando a la Ciudad de México o a Estados Unidos, cada fin de semana, mientras el estado se sigue desangrando.
