Aun estando implicado en varios casos de corrupción, de nexos con cárteles y en el asesinato del periodista Rubén y la activista Nadia, así como de tres mujeres más; el Jefe de Plaza en Veracruz, Javier Duarte, sigue cometiendo delitos en la total impunidad y con todo el descaro del mundo. Sus sicarios uniformados, nuevamente, volvieron a golpear a un periodista y después se escudaron en la defensa del delincuente Duarte, para salir ‘sin rasguños’ y sin ser molestados después de delinquir. En Veracruz, el delincuente Duarte, se muestra todos los días como el criminal más peligroso de todos los Jefes de Plaza en el país.
