Si alguien se pregunta aun, cuál es el motivo de tanta violencia en Michoacán, además de su riqueza natural, puede encontrar la respuesta en un detalle simple: el Puerto de Lázaro Cárdenas, punto clave del comercio entre Asía y América del Norte. Es a ese lugar donde llegan todos los precursores químicos para la producción de drogas sintéticas, que han relegado a segundo término a la marihuana y cocaína, por sus enormes utilidades y su fácil elaboración. La Sierra en Michoacán es el sitio perfecto para levantar laboratorios clandestinos donde se produce la mayor cantidad de metanfetaminas que después llegará a Estados Unidos.
La fabricación de drogas sintéticas en México en los últimos años, ha puesto en evidencia la complicidad de autoridades y crimen organizado. Nos hemos convertido en uno de los principales productores de estas sustancias y eso no se puede entender sin que en los puertos mexicanos haya gente involucrada, que esté permitiendo la entrada de precursores químicos, que en su mayoría llegan de Oriente. ¿Será por eso que Lázaro Cárdenas es un puerto tan estratégico para el mal gobierno? Sí, esa es una de las razones.
Siguen loa hallazgos de lugares que han sido usados por loa criminales para fabricar drogas sintéticas. Aun cuando el mal gobierno decrete que con la captura de los capos de los cárteles se acabará el problema del crimen organizado, este tipo de instalaciones demuestran que las organizaciones siguen operando y que la estructura permite que alguien más tome el lugar de los que van cayendo.
México es el productor número uno de metanfetaminas; un lugar nada honroso. Y Michoacán es el estado donde más narcolaboratorios se encuentran instalados y operando. El operativo que ELLOS implementaron, no ha servido para detener la producción de drogas sintéticas. Seamos sinceros; es porque se benefician de este lucrativo negocio. Todos saben dónde están, todos saben quiénes los trabajan, pero no van por ellos, porque se les acaba la vaca gorda. De vez en cuando, para hacer como que trabajan, desmantelan uno, como hoy.
