Cada vez son más frecuentes los hechos violentos, muy al estilo del crimen organizado, en el Distrito Federal. Pero el Jefe de Plaza en la capital del país, se sigue negando a reconocer que hay cárteles en la entidad. ¿Será que no le gusta que alguien más le ocupe la plaza o será que quiere vivir de ‘imagen’, muy al estilo de los otros delincuentes que están en los gobiernos estatales y federal?
«yo no puedo hablar de alguna tutela de algún pueblo de esa naturaleza, cuando ese pueblo ya se encuentra inmerso, involucrado dentro de la vida social de una comunidad como el Distrito Federal, no es un pueblo que residía cuando llegaron los españoles… Ya se incorporaron pues a la vida social de una ciudad… Ya sus gentes conviven con todos nosotros, ya tienen estudios universitarios, ya tienen un nivel económico donde se pueden ganar la vida trabajando en las actividades normales de una comunidad como el D.F., no puedo considerar que ese tipo de gente sea una comunidad indígena»; son las palabras que pronunció José Antonio García Guillén, Magistrado del Poder Judicial de la Federación, para desestimar el amparo que promovía el Consejo del Pueblo de Santa Cruz Xochitepec, en el DF.
Aquél fatídico día, México se despertó y la tierra temblaba. También temblaba la estructura del mal gobierno y quedó derrumbada su poca credibilidad, su incompetencia y nula capacidad de reacción, cosa que el pueblo recuperó y se unió como jamás se había visto. La gente de abajo, NOSOTROS, fuimos quienes logramos levantarnos de entre los escombros y rescatar la vida cotidiana en el país. Miguel de la Madrid, el delincuente que mal gobernaba, pasó a la historia como el personaje más gris de todos los tiempos.
No nos sorprende que en las cárceles se violen fraglantemente los derechos humanos, porque allá adentro dominan mafias de políticos y criminales (o criminales políticos). No nos sorprende, porque afuera en las calles, los derechos humanos también son violados sistemáticamente; así que dentro, donde no se ve o se ve menos, es mucho más fácil toparnos con datos de terror como los que mostramos en este video.
Durante el Segundo Foro por la Libertad de los Presos Políticos de San Bartolo Ameyalco, la hermana de uno de ellos, Eduardo Mejía, agradece a la gente el apoyo y la solidaridad, recordándonos que para seguir su lucha hacen falta muchas cosas, entre ellas dinero. El mal gobierno ha detenido a la gente más pobre, pero también a la más valiente, por lo que poder continuar con sus procesos penales y pagar una defensa adecuada, es necesaria la ayuda de los colectivos y personas que tengan la posibilidad de hacerlo.