El martes pasado, una docena de abogados pertenecientes al Gremio Nacional de Abogados de Los Ángeles, California, se reunieron en la entrada principal del edificio de inmigración, perteneciente al Departamento de Seguridad Nacional, para bloquearla y protestar en un acto de desobediencia civil por la crisis humanitaria ocasionada por las deportaciones a inmigrantes mexicanos y centroamericanos.
Exhortaron al presidente de los E.U.A, Barack Obama, para que detenga las deportaciones, acción principal en su política migratoria, y así evitar la desintegración de muchas familias indocumentadas, ya que eso afecta el bienestar de millones de personas.
Estos abogados, apoyados por miembros de la comunidad y organizaciones que defienden a los inmigrantes fueron detenidos y puestos en libertad inmediatamente en la tarde de ese mismo día, pero dejando con ello un claro mensaje, en el cual destacaron que la comunidad hará todo lo que esté a su alcance para frenar la separación de miles de familias.
Una de las abogadas que se manifestaba en la entrada del edificio, de nombre Betty Hung, hizo un atento llamado a las autoridades estadounidenses en torno al tema:
“Exigimos que el Departamento de Seguridad Nacional responda a la migración centroamericana y mexicana como una urgente crisis humanitaria. Que investigue las causas que originan la migración así como las formas efectivas de contrarrestarla.
Mientras muchos centroamericanos y mexicanos huyen de las condiciones violentas de sus países, ellos deberían calificar para asilo y el Departamento de Seguridad Nacional también debería considerar otras medidas de protección como proporcionar un estatus de protección temporal o TPS a más centroamericanos que ya se encuentran en Estados Unidos.”
Comparada con administraciones pasadas, la administración de Barack Obama es la que cuenta con más deportaciones y retornos en las fronteras. En lo que va de su mandato, más de dos millones de indocumentados han sido deportados o han sido detenidos en la frontera entre E.U.A y México. Según cifras oficiales del Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) La cifra total de deportados entre el 2009 y el 31 de agosto de 2015, acumulaba 2’488,302.
Y parece que la cifra aumentará exponencialmente ya que todo parece indicar que el gobierno de Obama no frenará las deportaciones, sino al contrario, ratifica su política migratoria con dicha actividad y la tiene como prioridad en su agenda política. Esto se puede constatar con la declaración que la directora de política interna de la Casa Blanca, Cecilia Muñoz, dio al programa Despierta América en el mes de enero: “Las personas que han cometido delitos muy serios y los indocumentados recién llegados a la frontera, siguen siendo una prioridad de deportación.”