En un solo día, en dos municipios, Acapulco y Chilpancingo, asesinan a seis personas (de las que se supo), pese al impresionante operativo de ‘seguridad’ que acaba de iniciar (una vez más) el Jefe de Plaza Astudillo. Aquí no hay más que de dos sopas y parece ser que quien no lo ve, es porque verdaderamente no quiere: la primera, es que en el mal gobierno son unos perfectos incompetentes y la delincuencia los rebasó completamente; y la segunda, es que esos incompetentes son además criminales y la muerte de tantas personas está perfectamente planeada de esta forma, para que la población siga sintiendo tanto miedo, que acepte ‘por seguridad’ la presencia de los sicarios de la Sedena en el lugar.
