Pese a que desde antes de 2012 Carlos Lomelí Bolaños, diputado de Morena en Jalisco, había sido ya señalado por el Departamento del Tesoro de los Estados Unidos de tener vínculos con grupos de la delincuencia organizada, AMLO aceptó su ayuda y financiación en dos campañas electorales.
Lomelí Bolaños que nuevamente es señalado por la OFAC de estar vinculado a la red de lavado de dinero de Raúl Flores, capturado en México y por quien Estados Unidos solicitará la extradición para juzgarlo por este y otros delitos, tenía ya una relación con él desde hace más de 10 años.
Carlos Lomelí habría también obtenido contratos millonarios para distribuir medicamentos en la Ciudad de México, en tiempos de Marcelo Ebrad; su empresa, Lomedic, recibió de su administración más de 1, 500 millones de pesos, sin concursar en ninguna licitación.
Pero, también, durante la campaña electoral del año 2000, cuando Andrés Manuel López Obrador contendía para la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México, el diputado, antes del Partido de la Revolución Democrática y hoy de Morena, apoyó a AMLO en sus aspiraciones por llegar al cargo. Así lo informan diarios como La Silla Rota y 24 Horas.
Para el año 2012, Lomelí volvió a dar apoyo al líder de la Secta (Morena), en su nuevo intento por llegar a la presidencia de la república. Todo esto, pese a que ya dese años atrás el gobierno de los Estados Unidos había señalado al también empresario farmacéutico de tener vínculos con el crimen organizado.
Esto nos lleva a concluir una cosa: el pragmatismo es tanto en López Obrador, que con tal de conseguir votos y apoyos para lograrlo, deja de lado el historial criminal de las personas que se lo brindan. No importa que estos no puedan pisar los Estados Unidos, porque podrían ser incluso detenidos. Para AMLO los votos lo son todo.
También compartimos con ustedes otra de las grandes vergüenzas de Morena y López Obrador; la incorporación a la Secta del criminal Leonel Godoy.
Morena sigue reclutando parásitos, pero lo de Leonel Godoy no tiene madre