Todo fue un engaño. A Semeí Verdía y su gente en Ostula, los engañaron pidiéndoles las armas para llevarlas a «verificar» a un cuartel del ejército. Ellos, obviamente, no iban a andar desarmados, cuando han estado siendo agredidos por el crimen organizado y el crimen gubernamental; así que tomaron otras armas y esperaban a que las ‘reglamentarias’ les fueran regresadas. En ese momento, los delincuentes que mal gobiernan México, los llamaron a una reunión a La Placita, sabiendo que ellos irían armados y que las armas que llevarían no serían ‘oficiales’, entonces alegando ‘portación de armas de uso exclusivo del ejército’, detuvieron al Comandante de la Policía Comunitaria en Ostula. En el video, la narración de algunas de las personas involucradas:
Dimos a conocer la detención de Semeí e informábamos que ya había sufrido varios atentados y que desde el mal gobierno en el estado de Michoacán, se le habían proporcionado dos camionetas blindadas para proteger su integridad. Esas camionetas fueron el anzuelo que usaron para detenerlo.
La noticia nos despertó a la realidad oculta del mal gobierno: usan a sus sicarios del Ejército y Marina Armada de México, no para detener a los delincuentes; los usan para entrar y dispararle a los pobladores, sin importar que en sus actos mueran niños, como ocurrió ayer en Ostula.
La comunidad de Ostula emite un segundo comunicado en el que pide solidaridad de la gente y que se sepa que #FueElEjército el que entró y disparó indiscriminadamente en contra de la población civil.